-
Delegaciones de EEUU y Ucrania sostendrán tercer día de conversaciones el sábado en Miami
-
Trump es agasajado en sorteo del Mundial y acepta con orgullo un Premio de la Paz
-
Sospechoso en caso de bombas cerca del Capitolio de EEUU comparece ante la corte
-
El Mundial de 2026 revela sus grupos en un sorteo que homenajea a Trump
-
Muere el arquitecto Frank Gehry, maestro del deconstructivismo
-
Trump aprovecha el sorteo del Mundial para lucirse y aceptar con orgullo un Premio de la Paz
-
Cinco grandes obras del arquitecto Frank Gehry
-
Egipto, Catar y otros países expresan preocupación por apertura por Israel de paso sólo para salida de Gaza
-
El Mundial conoce sus grupos tras un sorteo con un Trump protagónico
-
El banco Santander acepta pagar 22,5 millones de euros para cerrar un caso de blanqueamiento en Francia
-
Un Donald Trump dichoso recibe el primer Premio de la Paz de la FIFA
-
La FIFA le entrega su Premio de la Paz a Trump en inicio del sorteo del Mundial
-
Hallazgo de estatuillas en una tumba resuelve un misterio en una necrópolis de Egipto
-
Otro bolso Birkin que perteneció a Jane Birkin fue subastado por 2,8 millones de dólares en Abu Dabi
-
El planeta fútbol aguarda el sorteo del Mundial con Trump en el centro
-
El gobierno español "no excluye" que el origen del foco de peste porcina africana sea una fuga de laboratorio
-
La inflación en EEUU volvió subir en septiembre, al 2,8% anual
-
Meta se asocia con medios de comunicación para ampliar el contenido de su asistente de IA
-
Delegaciones de Ucrania y EEUU sostendrán otra reunión en Miami este viernes
-
Trump revive la Doctrina Monroe para América Latina
-
Norris vuelve a superar a Verstappen en los segundos libres de Abu Dabi
-
Milei anuncia el regreso de Argentina al mercado internacional de deuda
-
Putin seguirá suministrando petróleo a India, pese a la presión de EEUU
-
Frente al negacionismo, el jefe del IPCC recuerda el rol de los humanos en el cambio climático
-
Macron urge mantener el "esfuerzo de guerra" en favor de Ucrania al cierre de su visita en China
-
El Parlamento alemán adopta un proyecto para implantar un servicio militar voluntario
-
Netflix comprará Warner Bros Discovery por casi 83.000 millones de dólares
-
World Athletics abandona su controvertida reforma del salto de longitud
-
La UE impone una multa de 120 millones de euros a X, la red social de Elon Musk
-
Norris supera por poco a Verstappen en los primeros ensayos de Abu Dabi
-
El Mundial de 2026, una ocasión inmejorable para el lucimiento de Trump
-
Putin seguirá suministrando petróleo a India, pese a presión de EEUU
-
Venezuela elige reina de belleza en medio de la tensión militar con EEUU
-
La justicia turca ordena el arresto de 29 futbolistas en el caso de las apuestas
-
Trump quiere reajustar la presencia global de EEUU y aumentar el predominio en América Latina, según su nueva estrategia global
-
Un gran jurado decide no acusar a la fiscal general de Nueva York, enemiga de Trump
-
La política de Trump lleva a la legendaria cantante de folk Joan Baez a volver al estudio
-
La producción industrial en España sigue al alza en octubre
-
OpenAI llega a un acuerdo para construir un centro de IA de 4.600 millones en Australia
-
Un nuevo ataque de EEUU a una supuesta narcolancha en el Pacífico causa cuatro muertos
-
La policía recupera el huevo de Fabergé que un ladrón se tragó en Nueva Zelanda
-
Venezuela queda aislada tras la suspensión de vuelos de las aerolíneas internacionales
-
Jefe de Softbank dice que una super-IA podría convertir a humanos "en peces" o ganar un Nobel
-
Un sorteo por todo lo alto para el Mundial XXL con Trump como superstar
-
TikTok cumplirá con la prohibición de redes sociales a menores de 16 años en Australia
-
Lluvias dificultan limpieza en Sri Lanka tras inundaciones que azotaron varios países de Asia
-
OpenAI llega a un acuerdo para construir centro de IA de USD 4.600 millones en Australia
-
Corte aprueba el despliegue provisional de Guardia Nacional en Washington
-
La 13.ª Conferencia Global de Logística de la GLA concluye con éxito en Bangkok, Tailandia
-
Consejo de Seguridad de la ONU afirma estar dispuesto a apoyar a Siria durante visita
El "Sueño chino" de Xi se tambalea en un barrio de Pekín
Wu Di está casado, tiene un segundo hijo en camino, posee un apartamento en Pekín y un coche financiado con un empleo bien pagado en el sector tecnológico. A su manera, realizó el "Sueño chino".
Incluso superó la barrera de las restrictivas normas de residencia de China para mudarse desde la provincia oriental de Shandong hasta la capital, cerca del barrio de clase media de Shangdi.
"Las cosas van bastante bien", dice el hombre de 33 años con una sonrisa.
Su ascenso en la pirámide social de la bulliciosa y competitiva capital china ha ido en paralelo al liderazgo del presidente Xi Jinping.
Hace diez años que Xi desveló su "Sueño Chino", una gran visión para restaurar la influencia global del país a través de un esfuerzo colectivo para la prosperidad, el poder y la gloria guiado por el Partido Comunista.
Entre sus logros destaca haber sacado a decenas de millones de la pobreza con una economía efervescente gracias a la tecnología, las cadenas de suministro industriales y la energía incansable de 1.400 millones de personas.
Esto trajo nuevas libertades y oportunidades a la población, así como desafíos inesperados para un partido que prioriza el control y su supervivencia.
"Cada uno tiene sus propios ideales, aspiraciones y sueños", dijo Xi en un discurso el 29 de noviembre de 2012, poco después de convertirse en secretario general del partido.
"En mi opinión, realizar el gran rejuvenecimiento de la nación china es el mayor Sueño Chino", afirmó.
Pero mientras el presidente se prepara para obtener un tercer mandato sin precedentes, algunos ven que este sueño se difumina.
Incluso en el apacible barrio de Shangdi, la ansiedad acecha detrás de los adornos de la opulencia.
Allí, los trabajadores se preocupan por el agotamiento laboral, el coste creciente de la casa y la crianza o la presión social para casarse. Todo ello en una economía lastrada por la pandemia del covid-19.
Las expectativas de futuro están cambiando, lo que puede tener implicaciones profundas para el poder en China. "La gente persigue cosas diferentes a lo que solía", dice Anna Chen, de 29 años.
- Cuentos tecnológicos -
En la última década, enormes edificios de oficinas transformaron Shangdi de un suburbio ordinario a un lugar de referencia en el mapa tecnológico de China.
La zona está cercana a las ruinas del Antiguo Palacio de Verano destruido por soldados británicos en 1860, un recordatorio del "siglo de la humillación" de China ante las naciones occidentales que todavía escuece en Pekín.
Muchos de los nuevos residentes de Shangdi trabajan para gigantes tecnológicos como Baidu, Kuaishou o Didi Chuxing, empresas que dominan la vida diaria del país más poblado del mundo y que ahora superan a muchas de sus competidoras occidentales.
Con sus gafas con montura de alambre, camiseta oscura y pantalones deportivos, Sheldon Zhang, de 31 años, viste el uniforme de una generación de jóvenes profesionales tecnológicos que emerge como de las mejores educadas y más cosmopolitas de la historia de China.
Zhang dejó la universidad y cofundó una empresa emergente a los veintipocos años. Ahora es "arquitecto de experiencia de usuario" en una gran firma de internet, que juega con robótica e inteligencia artificial en un empleo para "el futuro beneficio de la humanidad".
Lugares como Shangdi son ejes de impulso para la inteligencia artificial, la computación cuántica, los sensores y los chips informáticos destacados como esenciales para la próxima fase de desarrollo chino en el plan quinquenal del partido.
Pero desde la industria advierten de un "invierno" en el sector ante la campaña de Pekín para poner coto a estas grandes firmas temiendo que tengan demasiado poder sobre los consumidores.
El crecimiento de los ingresos de firmas como Alibaba y Tencent se desacelera y los despidos en el sector aumentan.
Y la economía de China creció solo un 0,4% en el segundo trimestre de este año, su peor desempeño desde el comienzo de la pandemia.
"Sin una explosión en nuevas tecnologías, podemos empezar a desacelerar o retroceder", dice Zhang.
- Baño de realidad -
Algunos ya sienten el frío invernal.
Li Mengzhen, especialista en estrategia en una plataforma de videos cortos, dice que los trabajadores del sector ya se autodenominan "obreros digitales".
"Nuestra situación es bastante similar a los trabajadores migrantes de los 1990", afirma la mujer de 27 años.
"Nuestros programadores son como la gente que trabajaba en las máquinas de coser o enroscando tornillos (...) Sus trabajos son fácilmente reemplazables".
Aunque tiene un salario decente, teme que comprar una propiedad en Shangdi, donde los apartamentos fácilmente alcanzan los 100.000 yuanes (14.100 dólares) por metro cuadrado, estará siempre fuera de su alcance.
"Dejamos nuestros hogares para trabajar en Pekín (...) pero no podemos decir que seamos pekineses", asegura Li.
Es un malestar que se extiende entre su generación. Muchos de ellos entran en una espiral de tedio y terminan en la contracultura del "no hacer nada", abandonando este inacabable ciclo de trabajo persiguiendo las metas imposibles de la vida urbana.
La insistencia de China en la política "covid cero" ha recortado el crecimiento y hace todavía más difícil encontrar un trabajo, o incluso mantenerlo.
El desempleo joven en zonas urbanas ha concatenado máximos récord este año, alcanzando el pico en julio con casi un 20% de la población entre 16 y 24 años sin trabajo, según la Oficina Nacional de Estadísticas.
Aun así, la nueva cultura urbana ofrece escapatorias.
En un café en el sur de Shangdi, Feng Jing explica sonriente que acaba de dejar su trabajo en una plataforma audiovisual para convertirse en instructora de yoga.
"Soy alguien que busca la libertad", dice la mujer de 30 años. "No me siento atada al dinero o a otras ideas preconcebidas".
- Valores familiares -
En el "Love Park" del distrito, los niños se persiguen entre risas, vigilados por estatuas de piedra con inscripciones del pasado comunista de China.
"Estabilizar el bajo nivel de natalidad, aumentar la calidad de la población recién nacida" entona un monumento dedicado a la política de planificación familiar que se impuso a finales de los 1970 para contener el crecimiento demográfico y prohibió a muchas familias tener más de un hijo.
El gobierno ahora anima a las familias a tener hasta tres hijos para revertir la crisis demográfica que puede obligar a las menguantes y agotadas nuevas generaciones a hacerse cargo de los costes de cientos de millones de ancianos.
Este puede ser el mayor reto del "Sueño Chino" y amenaza con condicionar el gasto estatal para ofrecer atención sanitaria y pensiones a los aproximadamente 400 millones de personas mayores de 60 años para 2040.
Si la tendencia continúa, la población china alcanzará su máximo al final de la década antes de entrar en un declive "sostenido", según la Academia China de Ciencias Sociales, vinculada al Estado.
Esto puede infligir "consecuencias sociales y económicas extremadamente desfavorables" al país, advierte.
Hasta ahora, los intentos de impulsar la natalidad con rebajas fiscales y reembolsos del coste del cuidado infantil han caído en saco roto.
"Un hijo ya es suficientemente caro", dice un padre que no quiere ser identificado.
Otros cuestionan la necesidad de casarse o de tener hijos, una postura radical en una sociedad patriarcal donde existe una alta presión por empezar una familia.
Anna Chen dice que su objetivo es trabajar suficiente para viajar por el mundo y ayudar a sus padres en la vejez.
"Ya hay bastante gente en el mundo", dice a AFP con un seudónimo para evitar represalias de su empresa. "Y en la forma en que se desarrolla la sociedad, puedes vivir bien sin matrimonio o hijos", añade.
- Construir el sueño para otros -
En la sombra de un bloque de apartamentos de lujo, Wang Yufu, de 70 años, trata de escapar del calor de mediodía del verano de Pekín.
El anciano se mudó de la provincia oriental de Jiangsu a la capital más o menos cuando Xi desveló su "Sueño Chino".
Alegre y discreto, dirige un equipo de trabajadores migrantes que cuidan de los espacios verdes de Shangdi. Gana unos 6.500 yuanes (917 dólares) mensuales, varias veces más que cuando llegó.
La rápida urbanización de China en las últimas cuatro décadas se debe a la mano de obra migrante. Los datos oficiales indican que hay unas 290 millones de personas desplazadas del campo a la ciudad, muchas de ellas dedicadas a construir la China moderna con empleos de bajos salarios.
Pero los estrictos requisitos de residencia y los hinchados costes de vida impiden a la mayoría asentarse en las ciudades que han ayudado a construir.
Terminada la pausa del almuerzo, Wang persuade a su equipo para volver a trabajar.
Para él, las cosas están mejor que hace una década, pero los grandes sueños siguen correspondiendo a los demás: "La gente como nosotros nunca podrá permitirse una casa aquí".
F.Santana--PC